Psicoterapia infantil
«Los cimientos de la salud adulta se colocan en todas las fases de la infancia y de la niñez».
D.W. Winnicot
En la infancia, la manera de percibir, sentir y de expresar el mundo interno es diferente a como lo experimentamos en la adultez. Debido a que el cerebro y el cuerpo de la niña y el niño están en continua evolución, van pasando por distintas etapas. Su lenguaje, el manejo de sus emociones, su capacidad de abstracción y simbolización, van desarrollándose poco a poco. Es por ello, que la terapia infantil utiliza otras vías y lenguajes diferentes a la psicoterapia adulta.





Las herramientas fundamentales desde las que se aborda el trabajo terapéutico son a través del juego, los lenguajes expresivos (dibujo, modelado, música, escritura), sandplay, los cuentos, las marionetas y el movimiento. Estas herramientas nos brindan una maravillosa oportunidad de adentrarnos en lo simbólico y entender el interior del niño y la niña, a la vez que les permite proyectar su universo emocional, explorar su mundo interno, elaborar sus vivencias y darle nuevos significados.
En el proceso terapéutico, resulta fundamental incluir un trabajo con el sistema familiar que acoge, nutre y sostiene a cada criatura. En este espacio, la familia podrá desplegar su sentir a la vez que todo aquello que les preocupa en la crianza; con un acogimiento sin juicio y desde un profundo respeto, que les permita conectar, entender y resignificar tanto el malestar de su hijo/hija como el suyo propio.
Algunos de los síntomas que se pueden estar presentando:
- Fracaso escolar
- Dificultades de aprendizaje
- Acoso escolar
- Baja autoestima
- Dificultades sociales
- Dificultad con los límites
- Conductas disruptivas
- Dificultad en la regulación emocional
- Duelos, separación
- Trauma
- Ansiedad
- Obsesiones
- Depresión
- Hiperactividad
- Irritabilidad
- Miedos
- Trastornos del sueño
- Trastornos de la conducta alimentaria
- Adicciones
- Enuresis o encopresis